Casa Fuster

EL ASADOR

Una agradable sorpresa. Esa es la sensación que describe lo que sentimos al traspasar el umbral de la puerta de este asador de reciente reforma situado en la calle Rovira i Virgili, número 1 de Sabadell, al final de la Gran Via. Aunque lleva en realidad muchos años funcionando como bar-restaurante de polígono, sus propietarios decidieron dar un nuevo aire al establecimiento y ofrecer una imagen más cuidada y agradable tanto a la vista como al paladar. «Renovarse o morir», nos resume Salvador Fuster, uno de los responsables.

El resultado merece nuestra felicitación. Han logrado un establecimiento acogedor, decorado intencionadamente de forma rústica, para darle un aspecto de clásico asador con horno de leña de encina y carbón argentino, pero a unos precios populares. Sirva como ejemplo el cuarto de cochinillo de Segovia que cuesta poco más de catorce euros y que se cocina con los ingredientes más naturales para obtener el mejor sabor: agua, manteca y hierbas aromáticas. La pieza entera se puede solicitar siempre por encargo.

Cazuelas

La barra es una tentación para los carnívoros. Varias cazuelas rebosantes de viandas nos dan la bienvenida. Hay cordero lechal asado, cochinillo de Segovia, carnes de cerdo ibérico (pluma, presa, secreto, costillar…), suculentos chuletones de ternera gallega que piden ser devorados. Todo de un aspecto exquisito.

Para facilitar la elección existe un Menú-Selección los días laborables y que incluye un pica-pica de entrada y alguna de las carnes de la carta. También hay un menú de mediodía basado en cocina de mercado. Los fines de semana hay dos menús especiales; Uno dedicado al cordero y otro consagrado al cochinillo. Este asador abre a las cuatro de la mañana todos los días laborables para atender las necesidades de los obreros de la zona. Cada día a partir de las 6:30 hs. ofrece completos almuerzos cuando la brasa está a pleno rendimiento. Abre también los viernes noche, sábados todo el día y domingos mañana y mediodía.

Sartenes de huevos estrellados

A quién no le gusta una sartén con unos huevos estrellados, aderezados con jamón ibérico, morcilla o pimientos. Pocos paladares se resisten a un bocado tan humilde que a la vez brinda tan enorme placer.
Pues en esta casa los preparan con gran aceptación por parte del respetable y quizás por ello han tenido la brillante idea de hacerlo ahora también a lo grande.
«El huevo de avestruz equivale a veinticuatro huevos de gallina», nos aclara Salvador Fuster, uno de los responsables del negocio familiar. Así que lo mejor es ser generosos y compartir la ración entre varios comensales. Este plato está pensado para seis personas.
El mayúsculo huevo estrellado se presenta en una enorme paella con patatas paja, morcilla, jamón ibérico salteado o pimientos. O todo a la vez.
Es sin duda una de las grandes novedades de «Casa Fuster», uno de los restaurantes de Sabadell más solicitados.
Almuerzos
Su propuesta de almuerzos de cuchillo y tenedor comienzan a las ocho de la mañana y duran hasta las doce del mediodía.
El ajetreo de platos cocinados es ya a esas horas incesante. Además de las recetas estrella como pueden ser codillo de cordero rustido, callos, y pies de cerdo,  incluyen sugerencias del día como calamares en salsa o rabo de toro guisado, etcétera.
Además, en todo momento puede disfrutarse también de la carta en la que los reyes son el cochinillo lechal, lechazo asado y el chuletón de Ávila, todos con denominación de origen; entre otras deliciosas carnes cocinadas en horno de leña y carbón argentino.
Sus cazuelas presentadas en la barra son la carta de bienvenida y la promesa que la experiencia gastronómicará satisfactoria.

De noche abre sólo jueves, viernes y sábados.